En este camino de más de siete años he conocido a tantas mamás a tanto papás a tantas personas que transitan este recorrido que jamás hubiésemos querido recorrer, no tener un hijo y aprender a tenerlo de otra manera, no tener un hermano y aprender a tenerlo de otra manera.
Hijito Mío cuán difícil prueba que sólo sobrellevamos aferrados a la Fe a la Santa Palabra que endulza nuestras almas y evocando Tu Divina Presencia, como me dijo un día el padre Víctor Hugo: Cuando Marco estaba en tu panza no lo veían y lo sentían: Ahora Él también está aprendan a sentirlo. Y así es Mi Pequeño aunque duela es ese el único camino que construimos de a poquito para seguir hasta el mágico día en que nos reencontremos y nos fundamos en besos y abrazos.
Hoy a vísperas de un nuevo año atesoro en mi alma esta hermosa Carta que desde el cielo nos mandas a todos los que te amamos:
Cuando me haya ido, despréndanse y déjenme ir.
Tengo tantas cosas qué ver y hacer.
No deben atarme a sus lágrimas.
Sean felices; tuvimos diez hermosos años juntos y yo le di mi amor.
Ustedes sólo podrán tratar de adivinar cuánta felicidad me dieron.
Les doy las gracias por todo el amor que cada uno de ustedes me dio.
Pero ahora es tiempo de que yo viaje solo.
Así es que, si se sienten tristes por mí, háganlo por un rato
nada más; después...que su tristeza se convierta en confianza y fe.
Es sólo por un momento que vamos a estar separados,
así que bendigan los recuerdos de su corazón.
Yo no estaré lejos, porque la vida continúa.
Y si me necesitan, llámenme y yo vendré...
Aunque no me podrán ver ni tocar, yo estaré cerca.
Y si oyen con su corazón, escucharán a su alrededor muy suave y claramente mi amor.
Luego, cuando les toque venir por este mismo camino, yo saldré a recibirlos con una sonrisa y a darles la bienvenida a su casa.
Renacer Valdivia
¡¡¡Miles de Besos al Cielo Mi Hermoso!!!¡¡¡Te Amamos Eternamente!!! Tus Papis y Hermanos
